domingo, junio 20, 2004

¿Porqué un solo medicamento?

Esta es una pregunta que muchos pacientes hacen cotidianamente como por ejemplo, las madres que se desesperan ante un dolor, tos, fiebre, etcétera, de sus hijos o aquellos que están acostumbrados a que sus cefaleas sean suprimidas por un analgésico o algo similar. Por la misma ansiedad que los aqueja, piensan que el médico es un dogmático e insensible, cuando en cambio, su única y elevada misión, es restablecer la salud, o sea curar.
¿Qué puede hacer una aspirina o 7 días de un antibiótico?. La respuesta es muy simple.
Aquel que conoce la Ley de los Semejantes y la Ley de la Curación, cuando el medicamento único (semejante a nuestra manera de sufrir) produce la mejoría rápida, suave y permanente de adentro hacia fuera (de la mente hacia la piel) y de arriba hacia abajo (de la cabeza a los pies), no puede de ninguna manera permitir que otra sustancia extraña o heteróloga altere el camino de la curación.
Samuel Hahnemann en el parágrafo 273 de su “Organón de la Medicina” nos dice: “En ningún caso en tratamiento es necesario y por consiguiente no es tolerable, administrar a un enfermo más de un medicamento solo y simple, en una sola vez. No puede existir la más ligera duda acerca de que sea más uniforme con la naturaleza y más racional, prescribir un medicamento solo y simple en una sola vez, así como no puede concebirse el hecho de mezclar varias diferentes drogas. La homeopatía, que es el arte de curar verdadero, simple y natural, prohibe absolutamente dar a un enfermo al mismo tiempo dos diferentes sustancias medicinales”.
Y en el parágrafo 274 dice: “Como el verdadero médico encuentra en los medicamentos simples, administrados solos y sin combinarlos, todo lo que posiblemente puede desear (fuerzas de la enfermedad artificial que son capaces, por su poder homeopático, de vencer completamente, extinguir y curar de modo permanente la enfermedad natural), nunca pensará dar como remedio sino un medicamento simple y solo. El médico está atento a la sabia máxima que señala como un error emplear medios compuestos cuando los simples bastan.
Por estas razones también, aún cuando los medicamentos simples hubieran sido completamente experimentados para obtener sus efectos peculiares sobre el organismo en perfecta salud, es no obstante imposible prever como dos o más sustancias medicinales pueden combinadas, estorbar y alterar cada una la acción de la otra sobre el organismo humano.
Por otra parte, el empleo en las enfermedades de un solo medicamento cuya totalidad de síntomas es conocida exactamente, presta ayuda eficaz por sí mismo y sólo si se le ha elegido homeopáticamente.
Aún suponiendo que acontezca el peor caso de no ser elegido estrictamente conforme a la similitud de los síntomas y por consiguiente no beneficie, sin embargo, es bastante útil, pues no da a conocer los agentes terapéuticos provocando la aparición de síntomas nuevos, síntomas que el medicamento ya había determinado en su experimentación en el organismo sano, confirmándolos de esta manera, ventaja que no se obtiene con el empleo de los remedios compuestos”.
Dr. Guillermo Tesone
gtesone@bigfoot.com

3 comentarios:

CARLOS MONTENEGRO dijo...

Como enfoca Usted un paciente con deterioro en varios órganos y sin síntomas mentales o generales marcados? No se justifica prescribir varios remedios homeopáticos?

Guillermo Enrique Tesone dijo...

Siempre hay excepciones a la regla, pero por lo general es mejor para el paciente de a un medicamento por vez y según su patología...

CARLOS MONTENEGRO dijo...

Esa es una respuesta sabia, la excepción confirma o hace la regla. En mi práctica homeopática me toca hacer tales excepciones.